Espaqueti a la carbonara y scones.

Sobre las anéctotas de la Segunda Guerra Mundial las mas numerosas tienen que ver con los italianos, sobre todo por la fama que tenían de cobardes. Aunque como todo, hay un origen de esto que es la campaña de África.

Mussolini mandó sus tropas al norte de África para así fortificar la zona a petición de Hitler. Eran muchísimos hombres, pero lo que no mandó fue apoyo ni suministros. Los pobres italianos no llevaban un equipamiento adecuado, tampoco tenían combustible y para mas chiste, la comida de la que disponían era pasta y estando en África tenían que usar el agua para beber y no para cocinar. Viendo esta situación y que la llegada de los ingleses estaba cada vez mas cerca, no paraban de pedir ayuda a Mussolini, que no les hacía caso. Para él solo bastaba tener ahí tropas, pero le importaba tres pepinos el tener que mantenerlas.

Lo importante en un ejército es tener todo listo y a la gente contenta. Con toda esta situación los italianos tenían unas ganas tremendas de acabar con ese sufrimiento; Si su líder era capaz de dejarles así, ¿Cómo iban encima a dar su vida por él? Esa desmotivación tuvo muchísimo que ver en cómo se desarrollaron los acontecimientos en África mas adelante. Los soldados italianos huían como podían (se cuenta que unos médicos italianos dejaron a la mitad una operación de apendicitis) o se rendían a la primera de cambio. En muy poco tiempo y a pesar de que las tropas italianas eran muchísimo mas numerosas que las inglesas, éstos hicieron tantos prisioneros que no tenían espacio para mantenerlos (esperaban unos 3000 prisioneros y se encontraron con 130000). Al final los italianos terminaron haciéndose sus propios barracones y alimentando a los ingleses, encantados porque hacía tiempo que no comían decentemente. Al final Hitler tuvo que enviar a Rommel a echarles una mano.

Si Mussolini hubiera mantenido contentas a sus tropas y bien equipadas, seguro que el resultado de las batallas hubieran sido muy diferentes.

Una curiosidad: Dicen que los espagueti a la carbonara se inventaron durante la Segunda Guerra Mundial. Los italianos tenían mucha imaginación y conseguían hacer cosas riquísimas con lo poco que tenían. Aunque he leído en otros sitios que la receta ya existía en el año 1944 y los ingleses sólo le añadieron bacon a la salsa.